La “i” con el puntito redondo es todo un clásico. Todo el mundo la ha visto alguna vez o conoce a alguien que la hace. En los cursos y conferencias de grafología, es una de las preguntas que nunca falla en los curiosos “¿Qué significa hacer la “i” con el punto redondo?”
Para empezar, hay que decir que la letra “i” es una de las letras en las que descubre la capacidad de atención y buena concentración, si los puntos se ponen siempre, a veces o nunca, y también la habilidad de precisión, dependiendo de dónde se sitúe el puntillo respecto al palote.
Todos conocemos el dicho “Poner los puntos sobre las ies” para referirnos a dejar todo claro, sin faltar al detalle, al emitir una opinión. En efecto, poner los puntos sobre las ies es un rasgo de personalidad detallista, que no sólo cuida la estética en lo que hace, sino que además pone cuidado y meticulosidad en que no falte nada, en que esté todo completo.
El punto redondo puede ser de dos formas, y su significado depende de ello:
– El punto muy redondeado, perfectamente cerrado, es un rasgo un tanto infantil y de inmadurez, que marca un deseo consciente de llamar la atención. En niños o adolescentes se admite como normal, ya que seguramente lo irán perdiendo a medida que maduren la personalidad, y con ella la escritura. Pero en adultos se considera un rasgo de infantilismo, cierto egoísmo y extravagancia y, en el peor de los caso, narcisismo, si va unido a otros rasgos.
Podemos pensar que ese punto bien redondo es como un pequeño ombligo al que la persona que lo hace no deja de mirarse constantemente.
– El punto espontáneo, ágil, semiabierto ¡ese ya es otra cosa!. Al ser el punto de la “i” un rasgo escritural situado en la parte alta de la letra (ideación, imaginación, pensamiento, espiritualidad), el punto espontáneo representa un alarde imaginativo, una pequeña bolsita creativa, que se muestra como un deseo de salir de lo cotidiano y conocido, para innovar y generar ideas originales. Se considera positivo como rasgo de creatividad; pero si va unido a otros rasgos negativos en el escrito, puede constituir divagación mental e incluso huída de la realidad.
Si tú eres de los que hacen el punto redondo, ¿cuál es el tuyo?
Aparte del significado grafológico, el punto redondo también se ha hecho famoso en otros términos. Para terminar os dejo un antiguo dicho para referirse a aquellas opiniones que no admiten réplica:
“Díjolo Blas, punto redondo”
El punto de Blas ha derivado en otra expresión igual, pero más moderna: “¡Punto pelota!”
GRACIAS POR LEER ESTE POST.
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UN SALUDO.
SANDRA CERRO.
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