viernes , 8 diciembre 2023

Home » Hablar en público » IMAGINA QUE ERES
IMAGINA QUE ERES

IMAGINA QUE ERES

junio 27, 2014 7:00 pm by: Categoría: Hablar en público 2 Comentarios A+ / A-

Imagina que eres un sacerdote que regularmente oficia su misa dominical. Tienes que dirigirte a tus feligreses, lograr que tu mensaje llegue y hacer que sigan los mandatos de la Iglesia, que de eso se trata.

Ahora imagina que, además de la misa dominical con tus feligreses, tienes que oficiar esa misa para que se emita por televisión al resto de España. Tu obligación sigue siendo la misma, llegar al público, claro que ahora el público es un poco más amplio, y en dos formatos diferentes, presencial y televisivo.

En el primero de los casos te puedes permitir el lujo de moverte por el templo, pero en el segundo no puedes hacerlo a tu aire. Tienes que seguir ciertas directrices. Si lo retransmite televisión tienes que tener muy claro por dónde te puedes mover, cómo moverte y una serie de normas que te van o deberían dar.

En televisión tienes que lograr que el mensaje parezca el adecuado, aunque tengas que hacer cosas que en la vida normal no haces, movimientos diferentes, expresiones de otro tipo, énfasis de las palabras, etc.

Todo es diferente. Lo que te sirve para la misa presencial puede no servirte para la misa televisada.

Tienes que lograr llegar a los espectadores de toda España que te estén viendo, y llegar bien; es decir, que el mensaje que lances en esa ceremonia cale en ellos. Pero además tienes que conseguir que los feligreses que están contigo en el templo también sientan que ese mensaje les llega a lo más profundo de su corazón.  Algo harto difícil, casi imposible, porque la mayoría de ellos estarán pendientes de las cámaras de televisión, de si les enfocan o no, por lo que es muy posible que no se enteren de lo que cuentas. Al final de lo que se trata es de que el mensaje llegue con nitidez.

En estos casos el sacerdote se suele olvidar de algo esencial. Oficiar una misa es comunicación verbal y no verbal. La comunicación verbal es todo lo que decimos y la no verbal es cómo lo decimos. En esa manera de decir las cosas se incluye tanto el énfasis que ponemos a las frases, si hablamos deprisa o despacio, por ejemplo, como si llevamos tal o cual traje. También los movimientos que hagamos en el altar. Y cualquier cosa que llame la atención, positiva  o negativamente, mientras hablamos.

Y luego hay otro problema. A veces el oficiante se emociona con sus homilías y las hace de veinte minutos, algo totalmente infumable a no ser que ese cura sea un comunicador excepcional, algo que no suele ocurrir. Los curas son de lo más normalito hablando, igual que lo somos el resto de los mortales. Por eso hace falta técnica, que sí se aprende.

Recuerda que lo importante es llegar a los corazones. No te olvides de un tal San Agustín, que además de un bala perdida en sus primeros tiempos, con hijo extramatrimonial incluido, fue un excelente intelectual de la Iglesia.

San Agustín, con los pies bien puestos en el suelo, decía algo tan sencillo como que si ves que tus feligreses están moviendo sus traseros en los asientos es que tú no estás removiendo sus corazones.

Tú eres quien tiene que remover esos corazones, me da igual que sea en una iglesia que en una reunión de vendedores de coches.

 

Si tienes interés en algunos de nuestros cursos puedes verlos pinchando en http://www.juanmaromero.com/category/formacion-2/

 

Esta entrada no sirve de mucho sin el resto de las anteriores ni de las posteriores. Una campaña de comunicación no es una acción aislada sino un conjunto de estrategias que nos llevan a un mismo fin: lograr presencia mediática.

 

Si te ha gustado este artículo y para ser el primer@ en enterarte de todas las noticias, entrevistas, artículos, consejos… publicados en PRUEBATE MAGAZINE

¡Suscríbete gratuitamente a nuestro boletín!

índice

En el momento en el que te suscribas recibirás de regalo, a través de tu correo electrónico, el vídeo tutorial: “El saludo: el arte de dar la mano”, por Marina Fernández Estacio.

Más información.

IMAGINA QUE ERES Reviewed by on . Imagina que eres un sacerdote que regularmente oficia su misa dominical. Tienes que dirigirte a tus feligreses, lograr que tu mensaje llegue y hacer que sigan l Imagina que eres un sacerdote que regularmente oficia su misa dominical. Tienes que dirigirte a tus feligreses, lograr que tu mensaje llegue y hacer que sigan l Rating: 0

Acerca de Juanma Romero

Soy licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo Electrónico por el Grupo Recoletos. Redactor de TVE desde 1985, con responsabilidades en los telediarios de TVE. Entre 2007 y 2012 he sido editor de informativos de Canal 24 Horas. Posteriormente director de Los Desayunos de TVE. En la actualidad soy director y presentador de Emprende, programa que emite semanalmente Canal 24 Horas y todos los canales internacionales de TVE. Desde 2007 hasta 2013 he sido considerado uno de los 10 mejores profesionales de Comunicación en España según Top Ten Business Experts. En 2014 he recibido dos premios de ámbito nacional por mi aportación al mundo del emprendimiento. Soy coautor de ¡Que se entere todo el mundo! (2013), editado por Empresa Activa, de Uso y abuso de la tecnología (2006) editado por Sekotia, y de En patera y haciendo agua (2011), editado en formato digital; fue el primer libro bilingüe en castellano y lenguaje SMS publicado en la Unión Europea. En noviembre de 2013 viajé a San Francisco, California. Allí impartí un taller en el Spain Tech Center, a las empresas instaladas en la aceleradora que allí han emplazado ICEX España Exportación e Inversiones, Red.es y Fundación Santander.

Comentarios (2)

  • Username*

    Hola, Paco. Topdo esto es importante, pero no olvides que aunque te equivoques, al ddía sigueinte probablemente no se acordará nadie. No hay que hacer un mundo de algo tan humano como es el error.
    Un abrazo.

  • Paco Castaño

    Artículo muy interesante Juanma. Gracias por compartirlo.

    Estoy muy de acuerdo en que cada medio de comunicación tiene su idiosincrasia, tu técnica, sus reglas…y sus efectos.

    En la misa del domingo, te equivocas y lo notan cien, doscientas personas (que no digo que sean pocas)… Pero en una retransmisión por televisión en directo, son cientos de miles los que te ven. Y además queda grabado para la posteridad, con lo cual el efecto (bueno o malo) es imborrable. El efecto amplificador lo es para la audiencia y también para el impacto.

    Es curioso que en cualquier área de la vida, todos los problemas tienen un porcentaje muy alto de problemas de comunicación. Da igual que sea una empresa, que una comunidad de vecinos, que la propia Iglesia o que tu familia. La comunicación es el punto clave para que las cosas marchen.

    Gracias de nuevo

Deja tu comentario

scroll to top